Bueno, os dejo la receta. Espero que os gusten...
150 gr de azúcar, a ser posible pulverizada o glas, si no da igual.
2 huevos tamaño L
150 gr de zumo de naranja
150 gr de aceite de oliva
En último lugar, agregamos la harina poco a poco y vamos amasando con las manos. Cuando esté la masa blandita añadimos las ralladuras de limón y naranja y seguimos amasando para que se mezcle bien. Cuando veamos que somos capaces de manejarla haciendo bolitas con las manos, entonces ya está lista nuestra masa. Es mejor que la dejemos reposar con un trapo encima unos 20 minutos como mínimo.
Pasado este tiempo procedemos a hacer los roscos. Nos untamos las manos con aceite y podemos darle forma de dos maneras. La primera, formando bolitas del tamaño de una nuez y luego presionando en el centro para hacer el agujerito. La segunda, hacemos tiras de un centímetro de grosor y juntamos los dos extremos. Yo, particularmente, prefiero la primera forma, quedan más redonditos.
Por último, calentamos mucho el aceite de girasol (mejor que de oliva que si no quedan muy fuertes) y vamos añadiendo los roscos. Dejamos freír hasta que estén doraditos y reservamos en un plato con papel absorbente para que empape el aceite.
Tenemos preparado un cuenco con el azúcar y la canela mezclada (a mi me gusta con bastante canelita, pero eso va a gustos) y aún un poco calientes los roscos rebozamos en esta mezcla. Dejamos enfriar del todo y ya están listos para tomar con un cafelito bien calentito para merendar.
NOTA: Se le puede añadir a la masa un chorreón de anís, tipo Marie Brizard o el que tengamos en casa. Eso también va a gusto del consumidor.
Música de acompañamiento: Feo, fuerte y formal de LOQUILLO